Historia del Hospital de Viladecans
El centro inició su trayectoria en 1953 con el nombre de Hospital de San Lorenzo de Viladecans. El equipamiento estaba gestionado por la Fundación Benéfico-Privada de San Lorenzo, en homenaje al patrón de los fundidores y fundada por la empresa de Gavà Roca Radiadores, con la intención de ofrecer asistencia sanitaria a los trabajadores de la fábrica. No obstante, desde que abrió puertas, el centro ya empezó a dar servicio también a la población de Viladecans y Gavà para satisfacer las carencias estructurales del sistema de salud de la época.
La inauguración del Hospital fue el 21 de junio de 1953 y a ella asistió el arzobispo de Barcelona, Gregorio Modrego. El cuadro facultativo ofrecía servicio de beneficencia en la población y la organización del centro iba a cargo de una comunidad de monjas de la Congregación Hermanas Carmelitas de la Caridad. A lo largo de veinticinco años el Hospital de Viladecans fue el hospital de referencia de la comarca, en un contexto de oleadas migratorias en que la población conjunta de Begues, Castelldefels, Gavà, Sant Climent de Llobregat y Viladecans se multiplicó por cuatro. Aun y el gran aumento de la población, la carencia de infraestructuras sanitarias y los recursos escasos, el centro cubrió las necesidades básicas asistenciales, y algunas de más complejas, gracias al trabajo altruista y desinteresado del personal facultativo y sanitario.
El 1978 la Fundación de San Lorenzo cedió la gestión del centro al Instituto Nacional de Previsión (INP), el organismo estatal de protección social vigente. A lo largo de aquel año se organizaron varias manifestaciones para que el hospital lograra carácter de comarcal y se pudiera ampliar su capacidad asistencial. Pero, y a pesar de haber adquirido el compromiso de hacerlo, finalmente el INP no se presentó a la subasta pública para adquirir el centro y, durante aquel punto muerto de mala gestión, el hospital permaneció prácticamente cerrado, lo que propició graves inconvenientes para una población desprovista de asistencia hospitalaria de proximidad. Finalmente, después de intensas negociaciones y de una fuerte presión ciudadana, el 5 de marzo de 1980 el Hospital de Sant Llorenç se incorporó definitivamente a la red de centros sanitarios de la Seguridad Social.
A finales de 1981, cuando ya se habían traspasado las competencias de sanidad a la Generalitat de Catalunya, se presentó un proyecto para renovar y ampliar el hospital. Las obras se atrasaron y en 1984 se convocó una manifestación para reclamar la reapertura del centro, a la cual asistieron más de 4.000 ciudadanos. El mes de enero 1987 se abrió el nuevo Hospital de Viladecans, ya gestionado por el daba servicio en las poblaciones de Castelldefels, Viladecans, Gavà, Begues y Sant Climent de Llobregat, que entonces tenían 110.000 habitantes. Aun así, el centro no funcionó a pleno rendimiento hasta la apertura del Servicio de Urgencias de 24 horas durante el año 1988.
El inicio de los noventa fue muy prolífico, con la creación el 1990 de una Unidad de Cirugía Mayor Ambulatoria (CMA) pionera en el Estado español y que suponía una alternativa a la cirugía con hospitalización. Dos años después se impulsó la Unidad de Diagnóstico de Día, con el fin de prestar una atención rápida y personalizada a todos aquellos pacientes que, por su patología o características personales, requieren un trato preferente. Adicionalmente, el 1994 se construyó un nuevo edificio para ampliar el espacio dedicado a consultas externas y a pruebas diagnósticas que propició un adelanto sustancial en los procesos y el apoyo a la atención primaria.
El cambio de siglo se inició con la constitución de la Fundación Privada del HV para la investigación y la docencia, además de la inauguración, en 2002, del nuevo edificio de Urgencias. En noviembre de 2008 se presentó el proyecto para la ampliación y renovación del Hospital de Viladecans, pero la crisis económica paró la iniciativa. En un contexto de incertidumbre y recesión, en 2011 nace la Plataforma en Defensa del Hospital de Viladecans y de la Sanidad Pública, con el objetivo de reclamar la ampliación del centro. La entidad está integrada por asociaciones vecinales, miembros de algunos ayuntamientos del área de influencia del centro, representantes de trabajadores del Hospital y otras entidades ciudadanas. El 2013 la iniciativa consiguió más de 27.000 firmas en defensa del proyecto sanitario y las entregó al entonces presidente de la Generalitat, Artur Mas.
Finalmente, en julio de 2019 se inició la primera fase de ampliación y reforma de las infraestructuras del Hospital con la construcción del Edificio Mil·lenari i el Edificio Tarradellas, una infraestructura necesaria y largamente reivindicada que, después de ponerse en marcha en junio de 2024, ha permitido mejorar la accesibilidad y la calidad de la atención hospitalaria para las casi 200.000 personas que atienden y que viven en los municipios de Viladecans, Gavà, Castelldefels, Begues y Sant Climent de Llobregat.
